RECETA SECRETA

Todos deberíamos tener la oportunidad de ver un atardecer sin importar la ajetreada ciudad en que vivamos.

Lo primero es abrazar lo vivido tal cual se aparece. Hay que dejar ir todas esas suposiciones falsas y expectativas fuera de lo alcanzable para no estar en una oscura cueva de malos pensamientos. Vivir tu momento presente, sentir lo que uno vive en cada momento real y físico.

Alguien que, aceptando su existencia con todo lo bueno y lo malo que le conforme, también esté dispuesto a ver con mejor cara las cosas y cambiar el oxígeno que circunda al planeta.

 

Abandona lo que no te está funcionando: 
Empieza por esos pensamientos que sólo generan una telaraña en tu mente.

Toma decisiones firmes: 
Sobre todo cuando estés dudando. El estrés y la dificultad de las cosas están en la manera cómo reaccionas, no en cómo se da la vida.

Respira: 
No importa el tamaño de los problemas; primero debes estar en paz. Si no, todo sale mal.

Organízate: 
A veces no se puede decir que sí a todo. Por más buenas que sean algunas oportunidades, no podemos abarcar más de la cuenta.

Practica la gratitud: 
No busques razones para estar de malas. Mejor recuerda siempre la fortuna que te rodea en ciertas situaciones.

 

No todo es personal: 
Lo que los demás hacen es por ellos, no por ti. Así que, bueno o malo, no pienses que todo debe repercutir en tu persona.

Reconoce: 
Tienes dos cosas que aceptar en tu mente, probablemente tienes más de lo que necesitas y debes empezar a codiciar menos de lo posible.

Experimenta antes que acumular: 
Las vivencias son mil veces más importantes y significativas que cualquier adquisición material.

Haz lo mejor que puedas: 
Y disfrútalo. Si sale mal, ya te ocuparás de ello después.

Enfócate en lo positivo: 
No necesitas estar en un grupo de optimistas para saber que mientras mejor disposición tengas ante la vida, mejores cosas verás.

Deja ir: 
Si algo ya no está. Pues no está y ya. No te aferres.

Sé humilde: 
De lo contrario, no tendrás la mente abierta nunca y grandes experiencias se escaparán de tus manos.

Ve despacio: 
Si sigues pensando que a mayor rapidez, mejores resultados, te saltará tanto un ojo que se escapará de tu rostro.

Disciplínate: 
Los hábitos suelen generar felicidad. Además de aportar aptitudes y habilidades exitosas.

Descansa: 
Duerme; un cerebro y un cuerpo cansados son más propensos a destruir las buenas cosas en la vida. Y así, cuando las tengas enfrente, sabrás reconocerlas.

Siguiendo estos consejos verás cómo poco a poco el DRAMA ya no encontrará cabida en tus días y las buenas acciones, personas y relaciones llegarán por sí solas. Empezaras a vaciar la papelera de lo que no vale la pena! Si eres consciente no perderas tu energia en lo que ya no esta, o no es real. Comportamientos, patrones, gente, parejas totóxicas…Suena a que intentamos hallar el hilo negro de la creación o formular una receta secreta para la supervivencia.