NUMBER 42

El 42 se convierte en la respuesta al universo; es la réplica a la gran pregunta de la vida y todo lo demás.

Este número es la respuesta a preguntas cada vez más profundas y coincidencias que ahora parecen no serlo.

El 42 se ha convertido en una obsesión de la vida real. Tal como Jim Carrey en la película El número 23, ahora la opción que explica todo lo que vivimos y cómo vivimos es tan sólo un número: el 42.

Estas dos cifras se convierten en la suma de extraordinarios momentos históricos que hacen preguntarnos si el mundo puede explicarse con tan sólo dos números ordinarios.

La cifra tiene un significado especial; lo que según Platón podría llamarse como el estudio simbólico de los números, “el nivel más alto de conocimiento”.

Para Pitágoras, los números tenían alma y poderes mágicos, tal vez el poder absoluto de todo pueda ser representado por este número, puesto que se relaciona con eventos que no imaginamos. Por ejemplo, el marido de la Reina Victoria, el príncipe Alberto, murió a los 42 años, tenían 42 nietos y su sobresaliente nieto Eduardo VIII abdicó cuando tenía 42 años. Otro famoso que tuvo nexo con el número fue Elvis, quien murió a la edad de 42 años.

Otros ejemplos son el número de líneas que había en la Biblia impresa en la primera imprenta de Gutenberg o que el Titanic viajaba a una velocidad de 42 kilómetros por hora cuando colisionó con el iceberg. En el Este de Asia, los edificios evitan construir el piso 42, pues su sonido es el mismo a la palabra “muerte”.

Otros datos son que el presidente más joven de los Estados Unidos, Theodore Roosevelt, tenía 42 años cuando fue electo. O que la bomba atómica que devastó Nagasaki contenía el poder de 42 millones de palos de dinamita.

En novelas literarias clásicas como Drácula o Frankenstein, el fenómeno sigue: en muchas ediciones de estas novelas, el número 42 también hace su aparición. Es en la página 42 en la que Jonathan Harker se da cuenta que es prisionero de un vampiro y Victor Frankenstein es capaz de crear vida. Por otro lado, en Romeo y Julieta, la joven bebe una poción que le permite estar en coma, como si estuviera muerta por 42 horas.

Los tres álbumes mejor vendidos son Thriller de Michael Jackson, Black in black de AC/DC y The Dark Side of the moon de Pink Floyd; todos duran 42 minutos. Lewis Carroll utiliza este número en repetidas ocasiones en Alicia en el país de las maravillas y en la serie Lost también aparece el número.

Se dice que la primera teoría del número 42 fue creada por Isaac Asimov en La última pregunta. En el libro los seres humanos crean un superordenador que puede resolver el problema del universo que permite asegurar la superviviencia. Sin embargo, este tema se hizo popular en la novela de Douglas Adams The Hitchiker’s guide to the Galaxy; después de ésta, miles de adolescentes crearon teorías alrededor del número. El autor de la novela sólo respondió que haber escogido este número fue una elección aleatoria, una broma que hizo en las páginas de su libro.